Capítulo 1
Este es el capítulo introductorio. Es una serie de acción donde un jefe y varios detectives se dedican a cazar gringos que han cometido delitos en Estados Unidos o en México, y los deportan como una especie de venganza. Está buena, es muy activa.
En este capítulo, como introducción, capturan a un tipo en un vuelo, lo deportan, y luego comienzan con un caso donde una señora hizo que su perro atacara a un hombre —específicamente, le arrancara los testículos— por haber acosado a su hija por internet. Están buscando a ese señor, ya lo encontraron, pero ocurrió algo extraño: mataron al jefe.
Antes de morir, el jefe llamó a uno de sus hombres de confianza, que es parte de los Gringo Hunters. Le dijo que había descubierto algo grande mientras seguía a un sospechoso de otro caso. Encontró una libreta donde estaban apuntados muchos movimientos de personas importantes (o “cacas grandes”, como lo dijo él). Fue a contarle a uno de esos poderosos —supuestamente su amigo— y yo sospecho de él. Justo cuando iba a contarle todo a otro aliado, lo mataron.
Esa libreta la guardó en un casillero de una iglesia y se lo dijo a un testigo protegido, el cual ahora está encerrado en una casita para mantenerlo a salvo.
Capítulo 2
Los capítulos son cortos. En este, capturaron a un hombre que llevaban buscando desde hace 30 años, y también a otra persona —todos, obviamente, estadounidenses. A esta última la atraparon en un estadio de béisbol, gracias a que ascendieron al morenito a directivo y llegó una nueva integrante llamada Camila para apoyar al equipo. Con su ayuda, capturaron a un libanés-estadounidense buscado desde hace décadas.
Estos son como casos aislados, pero que se entrelazan con la historia principal: descubrir quién mató al jefe. El detective principal se involucra en la investigación, aunque está fuera de su jurisdicción. Accede al celular del jefe fallecido usando su huella en la morgue, y empieza a investigar por su cuenta. Todo está muy raro.
Capítulos 3 y 4
Siguen las capturas de delincuentes, pero en paralelo continúa la historia más grande: Nico, el detective principal, intenta descubrir qué pasó realmente con Cuauhtémoc, a quien apodaban "Temo".
También se desarrolla una subtrama sobre un proyecto llamado "Cartolandia" en Tijuana, que busca crear una nueva ciudad llena de casinos y centros de entretenimiento. Todo es muy turbio. Al parecer, Temo estaba involucrado en asuntos de deudas con casinos.
Además, los gringos están utilizando a un sacerdote —muy amigo de las familias que van a ser desalojadas— para convencer a la gente de dejar sus hogares. Muchos confían en él, pero también parece que el sacerdote oculta algo.
Capítulo 6
Este capítulo se centró completamente en la investigación del asesinato de Temo Villady. El equipo decidió que uno de ellos se dedicaría a los casos locales, mientras los demás investigarían su muerte en secreto.
Uno de los implicados (ya amenazó incluso a su propia sobrina por no cooperar con él) está claramente ocultando algo. Al final del episodio, logran localizar al sacerdote Kevin, pero justo cuando iba a hablar, le disparan en la garganta. Uno de los fallecidos en el enfrentamiento era cercano a Ortega. Poco a poco se va revelando la verdad.
Capítulo 7
La investigación sobre la muerte de Temo continúa. Todo apunta a un grupo llamado Sombras de Paz, vinculado al sacerdote y a un incendio ocurrido años atrás. Están intentando descubrir qué pasó realmente.
Mientras tanto, siguen atendiendo casos locales, como el de unas chicas que robaban objetos y los vendían por YouTube, entre otras cosas.
Capítulos 8, 9 y 10
Ortega logró dividir al equipo. Hicieron pasar a todos por controles de drogas, y al pelirrojo le detectaron consumo reciente, por lo que lo despidieron. Esto lo hizo caer de nuevo en las adicciones.
A Nico también lo corrieron por acceder sin autorización a evidencia relacionada con el caso del jefe muerto. Todo esto ocurre en paralelo a otros casos menores que el equipo sigue atendiendo.
En los capítulos finales, se muestra cómo Nico nunca dejó de investigar la muerte de Cuauhtémoc, a pesar de haber sido despedido. Intentaron desprestigiar a Temo diciendo que tenía nexos con el narcotráfico, pero lo único comprobado es que tenía adicción al juego y deudas en casinos.
Al final, descubren el punto neurálgico de todo: el sacerdote. Resulta que era un pederasta, y se sospecha que años atrás incluso mató a otro sacerdote, su compañero, mediante un incendio. Eran de los pocos que sabían la verdad sobre él.
Finalmente logran capturarlo, gracias a la insistencia de Nico y su equipo. Sin embargo, el sacerdote no acepta nada. Habla cosas extrañas sobre la religión; al parecer, creía que estaba "salvando" a los niños... aunque los abusara.
